miércoles, 22 de junio de 2011

Preservemos el santuario històrico de machu picchu

          Machu Picchu


 No obstante, el emplazamiento específico de la ciudad que nos ocupa (la cresta rocosa que une las montañas Machu Picchu y Huayna Picchu) no presenta huellas de haber tenido edificaciones antes del siglo XVObjetivos de conservación
es el santuario más popular del mundo
[editar] Especies que protege
Las principales son: el oso andino o ucurnari (Tremarctos ornatus) declarado símbolo del Santuario, el quetzal de altura (Pharomachrus auriceps) y el gallito de las rocas (Rupicola peruviana) en fauna y la wacanki (Masdevalia veitchiana) y wiñay wayna (Epidendrum secundum) palabras quechua que significan "llorarás" y "siempre joven", respectivame
Desde el punto de vista ambiental, el principal valor del Santuario reside en el rol que juegan los densos bosques de sus montañas para el mantenimiento del equilibrio hídrico de la región, captando el agua de las lluvias y conduciéndola, sin causar erosión, hasta el curso del Urubamba. Si estos bosques desaparecieran, se perderían con ellos numerosas especies de flora y fauna únicas y casi desconocidas para la ciencia; pero sobre todo se iniciaría en el área un irreversible proceso de deterioro ambiental que traería consigo consecuencias devastadoras para el hombre, como la destrucción de las vías de comunicación, la desaparición de zonas de cultivo, inundaciones y deslizamientos de tierra.
[[Archivo:Camino-inca-dia3-c02.jpg|300px|thumb|Caminantes sobre el antiguo camino inca, en una zona del bosque nuboso.]]
En la actualidad, la principal amenaza contra el Santuario, además de crecimiento desproporcionado del turismo, son los incendios forestales. Iniciados por agricultores residentes en las zonas altoandinas colindantes con esta área protegida, los fuegos estacionales, dirigidos a renovar los pastos naturales, se vuelven incontrolables e ingresan, ayudados por el viento y la fragilidad de la vegetación, ladera abajo hacia el corazón de los bosques de neblina. A menudo, el fuego arrasa con todo a su paso, destruyendo enormes extensiones de selva virgen, hasta que el efecto de las lluvias aplaca la furia de las llamas. En años recientes, la magnitud de estos incendios ha sido tal que su efecto devastador llegó incluso a trasponer los límites de la ciudadela inca de Machu Picchu.
Afortunadamente, la administración del Santuario, en coordinación con los diferentes sectores involucrados en su conservación, y con el apoyo de la cooperación internacional, viene trabajando en el desarrollo de un plan de uso múltiple de recursos, capacitando a los agricultores acerca de los peligros de la quema anual de pastos y ofreciendo alternativas de aprovechamiento no destructivo de los recursos del área a los pobladores que dependen de ella.
El Santuario Histórico de Machu Picchu fue reconocido internacionalmente por la Unesco en 1983, otorgándosele la categoría de Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad. Sólo dos áreas en las Américas ostentan esta distinción (la otra es Tikal, en Guatemala